Малцина са чували името Хуан Рамон Хименес (Juan Ramón Jiménez) - испански поет нобелист, роден в гр. Могер, Уелва (1881г).
И с целия ми респект към всички български творци, Хуан Рамон Хименес е сред онези, които само с две думи унасят мисълта ти, с една строфа те кара да се чувстваш необикновено...
Силно повлиян от модернизма и творбите на Рубен Дарио (никарагуански поет), той пише за любовта, реалността и всички онези човешки чувства, които са обземали душата му.
И както всеки истински творец почти една година от творческия му път е белязана в психиатрична клиника, където изживява любовна авантюра със съпругата на психиатъра си.
Хуан Рамон Хименес пътува изключително много през живота си. По време на гражданската война в Испания, той бяга в Пуерто Рико. Живее още в Хавана, Флорида, Ваингтон. През 1956г получава Нобелова награда за литература. Години наред е университетски преподавател.
На 77г той умира в Сан Хуан.
***
CÁLLATE POR DIOS, QUE TÚ...
¡Cállate, por Dios, que tú
no vas a saber decírmelo!
¡Deja: que abran todos mis
sueños y todos mis lirios!
Mi corazón oye bien
la letra de tu cariño...
El agua lo va temblando,
entre las flores del río;
lo va soñando la niebla,
lo están cantando los pinos
-y la luna rosa- y el
corazón de tu molino...
¡No apagues, por Dios, la llama
que arde dentro de mí mismo!
¡Cállate, por Dios, que tú
no vas a saber decírmelo!
***
Y YO ME IRÉ. Y SE QUEDARÁN LOS PÁJAROS...
Y yo me iré. Y se quedarán los pájaros
cantando;
y se quedará mi huerto, con su verde árbol,
y con su pozo blanco.
Todas la tardes, el cielo será azul y plácido;
y tocarán, como esta tarde están tocando,
las campanas del campanario.
Se morirán aquellos que me amaron;
y el pueblo se hará nuevo cada año;
y en el rincón aquel de mi huerto florido y encalado,
mi espíritu errará, nostálgico…
Y yo me iré; y estaré solo, sin hogar, sin árbol
verde, sin pozo blanco,
sin cielo azul y plácido…
Y se quedarán los pájaros cantando.
***
EL AMOR
El amor, a qué huele? Parece, cuando se ama,
que el mundo entero tiene rumor de primavera.
Las hojas secas tornan y las ramas con nieve,
y él sigue ardiente y joven, oliendo a rosa eterna.
Por todas partes abre guirnaldas invisibles,
todos sus fondos son líricos -risa o pena-,
la mujer a su beso cobra un sentido mágico
que, como en los senderos, sin cesar se renueva...
Vienen al alma música de ideales conciertos,
palabras de una brisa liviana entre arboledas;
se suspira y se llora, y el suspiro y el llanto
dejan como un romántico frescor de madreselvas...
***
DESNUDOS
( Adioses. Ausencia. Regreso )
Nacía, gris, la luna, y Beethoven lloraba,
bajo la mano blanca, en el piano de ella...
En la estancia sin luz, ella, mientras tocaba,
morena de la luna, era tres veces bella.
Teníamos los dos desangradas las flores
del corazón, y acaso llorábamos sin vernos...
Cada nota encendía una herida de amores...
-El dulce piano intentaba comprendernos.-
Por el balcón abierto a brumas estrelladas,
venía un viento triste de mundos invisibles...
Ella me preguntaba de cosas ignoradas
y yo le respondía de cosas imposibles...
